Aprende a eliminar las líneas del aparcamiento de forma eficaz
Hay varias razones por las que es posible que desees eliminar las líneas de aparcamiento de tu garaje. Puede que seas el administrador de un edificio que necesita cambiar espacios de estacionamiento, o que necesites redistribuir un garaje espacioso. Cualquiera que sea el motivo por el que quieres quitar las líneas de aparcamiento del suelo, el trabajo puede resultar difícil a menos que uses el método adecuado. Lo mejor es tratar la pintura de la línea del aparcamiento como graffiti y utilizar un proceso de eliminación específico probado y comprobado.
Para empezar, estos son los productos y accesorios que necesitarás para conseguir resultados óptimos:
Eliminador de graffitis líquido
Guantes protectores
Gafas protectoras
Lavadora a presión
Manguera y conexión de agua
Rodillo de pintura de 15 cm
Almohadillas rodantes de 15 cm
Escoba grande
Primeros pasos para eliminar las líneas de aparcamiento del pavimento
Antes de retirar la pintura de la línea de estacionamiento, si se trata de un aparcamiento comunitario, tendrás que informar a los conductores con unos días de antelación de que el aparcamiento estará cerrado. El día en que vayas a quitar la pintura del suelo del garaje, limpia bien el pavimento para eliminar todos los desechos. Lo más recomendable es hacerlo con una máquina de agua a presión. No olvides nunca protegerte con guantes y gafas.
Una vez el suelo está limpio y sin agua, aunque siga húmedo, procederemos a aplicar el eliminador de graffiti. Este producto viene a ser un decapante de pintura, ya que queremos desprender las capas de pintura del suelo, especialmente si queremos volver a pintar encima. Una opción para eliminar las líneas del aparcamiento sería lijarlas, pero es una alternativa lenta y costosa, por eso te proponemos aplicar un decapante, en este caso un eliminador de graffitis.
Asegúrate de que el producto esté bien mezclado antes de su uso para que tenga una composición homogénea. El eliminador de graffitis, como los decapantes, está compuesto de dos disolventes que actúan a diferente profundidad, consiguiendo arrancar desde la pintura más arraigada hasta la más superficial sin dañar el pavimento, por ello es necesario mezclar bien el producto antes de aplicarlo.
Vierte un poco de líquido eliminador de graffitis en una cubeta y moja el rodillo de pintura. Aplica el producto sobre las líneas del estacionamiento como si fuera pintura. Haz dos o tres capas para impregnar bien las marcas del suelo que quieres eliminar, así conseguirás un mejor resultado.
Consigue que tu garaje luzca como nuevo sin marcas de pintura
Deja que el limpiador de graffitis se asiente durante unos 90 segundos o hasta que la pintura burbujee. Nunca retires el producto antes de este tiempo, es probable que todavía no haya hecho efecto, pero tampoco lo dejes demasiado porque podría dañar el asfalto. Recuerda que es un producto altamente abrasivo y el tiempo de aplicación juega un papel fundamental a la hora de conseguir buenos resultados. A continuación realiza un lavado a presión para retirar el limpiador de graffiti.
Repite el proceso si la primera vez no se elimina toda la pintura de las líneas del estacionamiento. Limpia bien el suelo con la manguera a presión para retirar cualquier resto de la pintura antigua.
Para pinturas más resistentes y agarradas al piso, es recomendable utilizar una fresadora para hormigón con la que eliminar las líneas del aparcamiento de una forma mecánica. Si recurres a la fresadora de pavimento deberás pulir posteriormente la superficie del garaje para devolverle al suelo su regularidad.
Cuando el pavimento de tu garaje vuelva a lucir como nuevo podrás pintar otras líneas de estacionamiento si lo deseas. No olvides desechar correctamente el embase del eliminador de graffitis y cualquier resto de producto siguiendo sus instrucciones de reciclado.